En Jaca finaliza la travesía de los Pirineos. La ruta que lleva a Jaca permite apreciar los cambios que acompañan a este largo descenso hacia el sur. Desde los altos bosques de hayas, con sus aromas frescos y húmedos, hasta los campos de trigo atravesados por caminos de piedra seca, con aroma a pino y romero. Desde las silenciosas praderas de verano, donde se puede contemplar, hasta las animadas calles de los pueblos aragoneses, donde la gente está encantada de hablar con los demás.
Blanco y rojo (GR®)
Camino de senderismo
Sendero de Gran Recorrido (GR®)
Natural