De los montes del Livradois hasta las orillas y los cerros del Allier, este circuito os ofrece un descubrimiento rico y variado. Los Hombres han domeñado estos territorios para adaptarlos al policultivo tradicional (ganadería ovina y bovina, producción cerealista).
Descubriréis a lo largo de este circuito conocimientos locales como la pesca, la ganadería, los oficios de antaño. Aprovecharán también de las fragancias y de los sabores de este territorio paseando en los jardines botánicos y saboreando las especialidades. Por fin, descubren la autenticidad y el carácter de este territorio marcado por los países volcánicos y su geología a través de la piedra amatista, pero también a través de los castillos de recreo.