Oradour-sur-Glane, el entonces pueblo pacífico y próspero de la región de Lemosín, entró a la historia el 10 de junio de 1944. Ese día; 200 soldados de la división Das Reich rodean Oradour, juntan a los habitantes del pueblo en la plaza y después separan a los hombres, a quienes llevan a granjas y garajes, mientras que mujeres y niños son llevados a la iglesia. Todos serán asesinados y quemados. Esta horrible masacre dejó 642 víctimas inocentes. Sólo 6 personas escaparon al exterminio y pudieron atestiguar lo ocurrido.
Clasificadas «Monumento histórico» en 1946, las ruinas del pueblo mártir son testigo de la barbarie atroz. A través de sus salas de exposición, el Centro de la Memoria, inaugurado el 16 de julio de 1999, invita a cumplir un deber de reflexión.
La construcción de un nuevo pueblo fue culminada en 1953. Actualmente Oradour es un centro rural activo con numerosas pequeñas y medianas empresas e industrias, que animan las calles junto con los comercios, servicios y asociaciones.