Frente a la iglesia, gire a la izquierda por la pequeña carretera (señal de callejón sin salida). La carretera se convierte en una pista que atraviesa los prados en la cima de la colina. Siga recto en la primera bifurcación. Siga hasta que la pista haga una curva de 90°. Hay una estación de dibujo donde se puede admirar e incluso dibujar el paisaje.