Esta capilla es un precioso ejemplo de la arquitectura románica del siglo XII. El porche data del silgo XVII y el suelo está compuesto de piedras funerarias. Fuera, encontrará estelas discoidales, elementos característicos de la cultura funeraria vasca. Estas estelas funerarias tienen forma de disco encarado hacia el sol, encima de un soporte trapezoidal y representan el transito de la tierra al cielo del difunto.