En el siglo XIX, el cementerio medieval situado en la iglesia Saint-Pierre se hace exiguo. Está desplazado calle de l’Égalité.
Allí se encuentran particularmente las tumbas de los testigos de la Apariciones, de los hospitalarios, de la familia Soubirous (excepto la de Bernadette que se encuentra en Nevers) y del Ama de las Novicias de Bernadette.
Se nota igualmente el monumento a los muertos, obra rara del escultor Jean-Marie Mengue.