El desenmascaramiento se realiza entre principios de junio y finales de agosto. Se trata de la extracción del corcho y esta operación requiere la intervención de una mano de obra cualificada para no herir al árbol en cuestión, el alcornoque. Cada veinte años se extrae el llamado corcho "macho", que sólo puede utilizarse para la decoración. Sólo unos diez años después, la capa reproductiva, la capa "femenina", puede utilizarse para la producción de tapones o decoraciones de alta calidad. Al alcornoque no le faltan cualidades ecológicas: es un hábitat para aves rapaces nocturnas, atractivo para la fauna y la flora... ¡Incluso podría utilizarse como cortafuegos! El corcho es un aislante térmico natural que protege las partes vitales del árbol, que a veces se recupera de los mayores incendios.