La casa del abad Victor Doussy
El abad Victor Doussy (1878-1953), un poeta poco conocido, pasó 32 años trabajando en la comuna de Taller y realizó una gran labor de conservación de la iglesia. Amigo de Francisco Jammes y de Manuel Delbousquet, su gusto por las artes en general no siempre fue visto con buenos ojos por la jerarquía eclesiástica, que rechazaba sus inclinaciones literarias. Si sus amigos, deseosos de que siguiera bebiendo más allá de la medianoche, a veces retrasaban los relojes, él siempre se las arreglaba para celebrar su misa matutina. Aquí y allá se le reprocharon sus frecuentaciones "ateas". Pero estas supuestas divagaciones no bastan para ocultar la grandeza del alma de un hombre que escribió en uno de sus poemas, Soledad: "Si poseyera todo lo que se puede desear para ser feliz, me faltaría lo esencial: la felicidad de los demás".